La Gloria del Anillo (I)

Las Finales de la NBA han dejado los momentos más gloriosos de la historia del baloncesto mundial. Los títulos de Goerge Mikan en Minneapolis, el absolutismo de los Celtics de Bill Russell, la épica de Willis Reed o John Havliceck, el duelo entre Magic-Bird,  la “Era Jordan”, y el comienzo del siglo XXI con el dominio de Shaq y Duncan. Las finales crean mitos.

Magic, mágico.

Los Philadelphia Warriors ganaron el primer anillo de la NBA en 1947 tras imponerse a los Chicago Stags. Mucho ha pasado desde entonces. Pronto llegó la primera dinastía de la NBA, la de los Minneapolis Lakers dirigidos por George Mikan. Fue el primer jugador dominante del baloncesto. El pívot era imparable, y dada la inexistencia del reloj de posesión en los primeros años de la liga, algunos equipos intentaron pararle teniendo posesiones en ataque de minutos. Detroit ganó a Minneapolis por 24-19 en un partido de esta época. Ante tal estratagema la NBA aplicó la norma del reloj de posesión. Los Lakers ganaron cinco anillos entre 1949 y 1954.

El vacío de poder lo llenaron los Boston Celtics. Ganaron once anillos en trece años (incluyendo 9 consecutivos) en el periodo entre 1957 y 1969. Bill Russell dominó los aros y la faceta defensiva ante la impresionante capacidad para anotar de Wilt Chamberlein, MVP en la campaña de rookie y anotador de 50,1 puntos de media en una temporada (registro intocable que permanece en los anales de la historia). Los duelos entre estos dos hombres, que mantenían una relación de un gran respeto mutuo, solía ganarlos el “celtic”; gracias entre otras cosas a que contaba con compañeros como Bob Cousy y Don Nelson.

Estos Celtics fueron la pesadilla de los Lakers. No fueron capaces de derrotar a los Celtics en las finales, lo que dejó sin anillo a un jugador mítico en Los Ángeles, Elgin Baylor. El séptimo partido de la final 1969 en L.A, ganado por Boston gracias a un tiro de Don Nelson que se elevó hasta cinco metros tras tocar el aro y luego entró, fue el último éxito del mejor equipo de la historia, liderado por el gran Red Auerbach. La foto del entrenador de los Celtics fumando un puro es mítica para este deporte.

La maldición de los Lakers continuó con los Knicks en 1970. Las finales llegaron al séptimo partido que se disputaba en la gran manzana. Willis Reed estaba lesionado en los locales, y los Lakers de Wilt Chamberlein eran claros favoritos. Sin embargo algo sucedió. Willis Reed salió cojeando a pista, anotó las dos primeras suspensiones y elevó la moral de sus compañeros, que barrieron a los Lakers en un partido de leyenda dirigido por Walt Frazier. Dos años después terminó la maldición con la victoria de los Lakers por 4-1 frente a los Knicks, fue el primer anillo de la franquicia desde su traslado a California.

Otro momento de gloria lo firmaron los Celtics y los Suns en 1976. El quinto partido en Boston fue seguramente el mejor partido de todos los tiempos. Hubo tres prórrogas, estratagemas increíbles para mantener el partido en pie. La canasta de Gar Heard para forzar la tercera prórroga es uno de los mejores momentos jamás vistos.(vídeo anterior). Finalmente los Celtics se llevaron el choque por 128-126 y el anillo en el sexto partido.

La rivalidad entre Magic Johnson y Larry Bird en la década de los 80 subió este deporte a unos niveles nunca vistos. Magic le venció en la final universitaria, pero Larry fue el rookie del año en 1980. Sin embargo Magic dejó en aquel año la mejor actuación individual jamás vista. Sexto partido de las finales, Kareem lesionado y la serie volvía a Philly con los Lakers hundidos psicológicamente pese a mandar por 3-2. Apareció Magic y jugó el partido como center. 42 puntos, 15 rebotes y 7 asistencias en su temporada de rookie. Sencillamente mágico.

Luis J. González.