El buque hundido de capitán Kidd será convertido en museo subacuático

Santo Domingo.-  Los restos del barco del célebre capitán William Kidd, descubierto en junio pasado frente a la costa de la isla Santa Catalina, en la República Dominicana, serán convertidos en un museo subacuático, informó hoy en Santo Domingo uno de sus descubridores.

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(EFE)

Fotografía cortesía de la Universidad de Indiana y disponible hoy, que muestra a Charles Beeker quien lidera el equipo de arqueólogos de esa Universidad y que creen haber descubierto los restos del barco del célebre capitán William Kidd frente a la costa de la isla Santa Catalina (República Dominicana).

Charles Beeker, quien encabezó el equipo de arqueólogos de la Universidad de Indiana (IU) que descubrió el barco, dijo en una videoconferencia que la idea de crear el museo es de "gran importancia" ya que, explicó, este se convertiría "en una gran atracción para las personas a nivel internacional".

"El área está bendecida por parques subacuáticos preciosos, áreas coralinas muy importantes y bellas. Sería una gran atracción" para los visitantes, argumentó Beeker.

Asimismo, aclaró que en los restos del buque del capitán William Kidd, Quedagh Merchant, "no hay tesoros".

"El verdadero tesoro es el barco", dijo, aunque no descartó que en interior del mismo se encuentren cerámicas u alguna otras cosas, pero insistió en que "no hay tesoro" porque "todo lo sacaron antes de que se hundiera".

Beeker confió en que el barco pueda ser conservado "por 300 años más como un patrimonio cultural" y apreciado por las futuras generaciones.

Los historiadores sostienen que cuando Kidd asaltó el Quedagh Merchant el buque llevaba a bordo un enorme botín de telas, sedas, oro, plata y otras mercancías procedentes de la India oriental.

Sin embargo, y ante las acusaciones de piratería que acuciaban, el capitán tuvo que dejar el barco a cargo de sus hombres de confianza y partir hacia Nueva York para tratar de limpiar su nombre ante la justicia.

Según el antropólogo Geoffrey Conrad, de la IU, la tripulación que quedó a cargo del buque mercante saqueó su contenido y hundió el mismo en el Río Dulce.

De acuerdo con Beeker, los investigadores decidieron revelar el hallazgo porque la experiencia ha demostrado que no se debe "mantener las cosas en silencio", y pidió al Gobierno dominicano delimitar la zona para proteger el buque "antes de que ocurra cualquier cosa".

"Tenemos que trabajar con la Secretaría de Medio Ambiente y con la Cultura de la República Dominicana para que se tomen las medidas de lugar y el área donde se encuentra el buque sea considerada una reserva", prosiguió en la videoconferencia.

El buque, que fue descubierto por un autóctono residente en Casa de Campo (costa sureste de la República Dominicana), podría aportar información muy valiosa sobre la piratería en el Caribe y sobre el legendario capitán Kidd.

Cuestionado sobre la autenticidad del barco, el director técnico de la Oficina Nacional de Patrimonio Cultural Subacuático de la República Dominicana, Francis Soto, dijo que según la historia "en el centro del banco había una gran concentración de anclas y cañones", y eso es justamente lo que lo arqueólogos encontraron.

Uno de los cañones será sacado para su identificación y, posteriormente, será exhibido en tierra para las personas que no pueden acceder al lugar, afirmó Soto.