El campeón del mundo pone a prueba la competitividad española

Elche (Alicante).-  La capacidad de competir ante grandes rivales está en juego para España en el duelo amistoso que le mide en el Martínez Valero de Elche ante el vigente campeón del mundo, la selección italiana que dirige Roberto Donadoni, el ex centrocampista del Milán, que ha añadido al juego de los "azzurri" más dosis de técnica que su antecesor, Marcelo Lippi.

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(EFE)

Varios jugadores de la selección española realizan ejercicios de estiramiento durante el entrenamiento celebrado esta noche en el estadio Martínez Valero de Elche.

El partido será el último gran ensayo de los de Luis Aragonés antes de la Eurocopa. La última gran piedra de toque para medir el nivel de juego y la competitividad de una escuadra que quiere hacer historia en la cita de junio en Austria y Suiza.

Es la principal preocupación del técnico. Aragonés tiene claro que España debe de aprender a pugnar en los momentos clave. A no amedrentarse ante enemigos de enjundia. Es la mejor receta para afrontar la competición estival con posibilidades de éxito.

El técnico español admira el fútbol italiano, el segundo mejor del mundo, según confesó, después del brasileño. Cree que España ha conseguido conjuntar un buen grupo de jugadores con un centro de campo repleto de técnica con el que poder llevar la iniciativa sobre el terreno de juego, pero también es consciente de que no se tiene el carácter italiano, el que ha llevado a este combinado a alcanzar la cima en muchas ocasiones.

"Si algo hay que hacer con el fútbol italiano es imitarlo. Nosotros tenemos ahora otro tipo de juego y vamos por ese camino porque es el único que nos puede dar la posibilidad de ganar. Lo importante es ganar. Lo importante en fútbol es ganar y luego haces apuesta por buen juego", dijo Luis en la conferencia de prensa previa al partido para explicar lo que "envidia" de los italianos.

Para intentar mezclar el temperamento con el juego lustroso, el entrenador español pondrá en liza un equipo que puede ser perfectamente el que debute en la Eurocopa contra Rusia en Innsbruck el 10 de junio.

Luis tiene perfectamente perfilado el esquema y las variaciones ya van a ser mínimas y forzadas por las circunstancias. El dibujo de Aragonés lo forman cuatro centrocampistas "jugones" (Iniesta, Xavi, Cesc y Silva) con un punta por delante (Torres o Villa) un guardián por detrás (Senna o Xabi Alonso) y cuatro defensas (Sergio Ramos, Puyol, Marchena y Capdevila) con Casillas como cancerbero.

Es la base de su proyecto, el que va a poner sobre el tapete del Martínez Valero, que registrará un lleno total para acoger por quinta vez un encuentro de la selección absoluta. La última se produjo el 3 de junio de 2006 con victoria de España sobre Egipto y goles de Raúl González y José Antonio Reyes.

Luis tiene la duda ante Italia de la participación de Fernando Torres, que ha llegado a la concentración en Elche con secuelas de algunos golpes sufridos en el partido liguero del Liverpool del pasado domingo. En el caso de que finalmente el madrileño no pueda saltar al campo, en su lugar lo haría el valencianista David Villa.

Para Italia, la cita también tiene relevancia. Roberto Donadoni, que accedió al cargo después del Mundial de Alemania 2006, tiene ante sí un difícil reto. Su antecesor, Marcelo Lippi, llevó a la "azzurra" a lo más alto en el país germano y Donadoni se encuentra en la obligación de hacer lo mismo en la Eurocopa.

Si no lo consigue, si continuidad es prácticamente un imposible. Eso es lo que tiene apalabrado con la Federación Italiana, que aguardará hasta el mes de julio para decidir si prolonga su contrato. Si no lo hace, Carlo Ancelotti, ahora entrenador del Milán, se perfila como su sustituto.

Como jugador, Donadoni era un centrocampista técnico, con visión de juego, que militó en el Milán en dos etapas (1986-96 y 1997-99), club en el que vivió grandes momentos y estuvo a las órdenes, entre otros, de Arrigo Sacchi, del que ha aprendido muchas cosas.

Donadoni no ha realizado una renovación profunda con respecto a los hombres utilizados por Lippi, pero sí ha conferido al conjunto un carácter más ofensivo, con más gusto por el balón.

Para ello, posee en el centro del campo a un jugador como Andrea Pirlo, auténtico director de orquesta de los azules, y a Massimo Ambrosini, su gran escudero, y por delante a un pletórico Luca Toni, máximo artillero de la Bundesliga, y Marco Borriello, el número uno de los anotadores de la liga italiana, desechado el año pasado por el Milán y estrella del Génova.

Pero una de las principales aportación de Donadoni a la plantilla con respecto al Mundial alemán es Antonio Di Natale, delantero del Udinese, que tuvo una gran actuación en el amistoso que Italia ganó a Portugal (3-1) el pasado febrero.

Mantiene Italia su gran fortaleza competitiva con un equipo con una media de edad muy superior a la de España. Es un conjunto experto, curtido en grandes batallas y en el que la edad de la mayoría de sus componentes no baja de los 30 años (Materazzi, Cannavaro y Panucci tienen 34), todo lo contrario que España, repleta de jóvenes valores, en la que los más veteranos son Puyol y Capdevila, con 29 años.

Son dos rivales que podrían encontrarse de nuevo en el cruce de cuartos de final de la Eurocopa y que medirán sus fuerzas en un partido que, aunque catalogado como amistoso, tiene poco de ello y tras el que España seguirá sin ganar a Italia en un encuentro oficial desde 1920, cuando lo hizo en los Juegos de Amberes.

Alineaciones probables:

España: Casillas, Sergio Ramos, Marchena, Puyol, Capdevila; Senna; Iniesta, Xavi, Cesc, Silva; Fernando Torres o Villa.

Italia: Buffon; Oddo o Panucci, Materazzi, Cannavaro, Zambrotta; De Rossi, Gattuso, Pirlo, Ambrosini; Di Natale y Luca Toni.

Arbitro: Fritz Stuchlik (AUT)