Una exposición repasa el declive y la recuperación de un monasterio cisterciense del siglo XII

Zamora.-  La exposición "Santa María de Moreruela 1808-2008: del olvido a la memoria" repasa en Zamora a través de fotografías, enseres y diversos documentos los dos últimos siglos de vida del monasterio cisterciense de Santa María de Moreruela, del siglo XII, ubicado en el término de Granja de Moreruela (Zamora).

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(EFE)

Niños observan una momia expuesta en la exposición "Santa María de Moreruela 1808-2008: del olvido a la memoria", que repasa en Zamora, a través de fotografías, enseres y diversos documentos, los dos últimos siglos de vida del monasterio cisterciense, del siglo XII, ubicado en el término de Granja de Moreruela (Zamora).

La muestra, que esta tarde ha inaugurado el director general de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, Enrique Sáiz, permanecerá abierta en la sala de exposiciones temporales del Museo de Zamora hasta el próximo 14 de septiembre, según han informado a Efe fuentes de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora.

La exposición ofrece detalles de la historia de este monasterio, que alcanzó su esplendor a lo largo de los siglos XII y XIII, que fue declarado monumento nacional en 1931 y que está catalogado como Bien de Interés Cultural.

En el siglo XIII, los dominios del monasterio abarcaban grandes extensiones de terreno por Tierra de Campos, Lampreana, las Lagunas de Villafáfila, la Sierra de la Culebra, la Alta Sanabria, Villalpando y Toro, además de ocupar tierras de la provincia de Salamanca y del entorno de Braganza, en Portugal.

Tras un segundo periodo de esplendor en la segunda mitad del siglo XVI que se prolongó hasta el siglo XVIII, pero a principios del XIX llegó la época de decadencia.

Entre 1808 y 1809 la abadía fue ocupada tanto por las tropas francesas como por las nacionales durante la Guerra de la Independencia mientras que en 1835, con la desamortización de Mendizábal, abandonaron el monasterio los doce monjes y las más de 400 ovejas que quedaban en él.

A partir de entonces, tal y como se refleja en la exposición, el monasterio vivió un declive que le llevó al estado de ruina y al que se ha puesto remedio en los últimos años con diversas actuaciones de la Junta de Castilla y León para restaurar y acondicionar las partes del monasterio que se conservan en pie.