Piscinas abiertas de madrugada para soportar el calor

JAÉN.-  Con los precios por las nubes y la crisis económica, las vacaciones no son tan largas como antes. Pero un buen chapuzón no viene mal a nadie, sobre todo en el sur de la Península, donde siempre se registran las temperaturas más altas. En Jaén estamos de enhorabuena, ya que el Ayuntamiento ha decidido abrir las tres piscinas municipales durante la noche. Es la llamada Cita Acuática Nocturna Metropolitana.

Xosé Castro (Flickr)

De martes a sábado, y de 22 a 1:30 horas, el calor veraniego de la provincia puede desaparecer fácilmente. Basta con pagar dos euros y decidirse por las piscinas de El Tomillo, La Salobreja o Las Fuentezuelas. Con esta idea, el Consistorio cree haber dado con la solución para el sofocón del calor nocturno. Y no es tontería, el aire acondicionado o los ventiladores tradicionales se pueden sustituir durante unas horas a cambio de mojarse los pies en la orilla de las piscinas municipales.

Eso sí, y como siempre, la iniciativa no ha contentado a todos. Si bien los bañistas han encontrado una nueva manera de 'refrescar' sus ideas en el agua, algunos vecinos no opinan lo mismo. Aquellos que viven cerca de las piscinas municipales se han sumergido en una ola de ruido, alboroto y escándalo nocturno. Según ellos, los jóvenes se aprovecharán de los recintos para convertirlos en el nuevo 'botellodrónomo' de la capital. Según los perjudicados, la idea de que todos se puedan llevar comida y bebida al césped de las piscinas ayuda a que los jóvenes se animen al botellón.

En cambio, otras tantas familias ven con buenos ojos el proyecto. Las actividades que se realizarán, como un parchís gigante, juegos en el agua o waterpolo, han animado a muchos. De hecho, el recinto de La Salobreja ya ha colgado dos veces el cartel de 'repleto', y la idea 'refrescante' que se inició el pasado verano ha comenzado a dar sus frutos: las piscinas sólo descansarán los domingos y los lunes para mantener las instalaciones.

JCuerva (Flickr)

Por su lado, la corporación municipal sigue insistiendo, a pesar de las quejas de los vecinos, en que pasar la noche en remojo no conlleva hacer botellón, sino todo lo contrario. Las calurosas noches que se respiran en la ciudad permiten que las 'pandillas' de familiares y amigos se reúnan en el agua. Con esta iniciativa, muchos tienen la oportunidad de bañarse sin tener un chalet en la playa o una piscina en casa. Y eso es bueno, ¿no?