La ministra transparente y el orgasmo pepero

MADRID.-  Bibiana Aído no existe. Ni para sus compañeros ni para la oposición. La ministra de Igualdad se vislumbraba como una presa fácil para que el PP le diera caña, pero como hasta en su propio partido es un cero a la izquierda no van a gastar ni un minuto en desprestigiar su labor. En caso de necesidad, existen otras piezas más jugosas, como Corbacho o Magdalena Álvarez, empeñada en meter la pata sí o sí.

(EFE)

Los diputados vuelven 'al cole'.

Mientras Zapatero, tedioso pero tranquilo, contesta a los distintos grupos parlamentarios, hagamos un repaso a sus señorías. Como sentencia un diputado pasilleando: "Lo peor de la crisis está por venir y lo mejor de las políticas de Zapatero está en el pasado" -y se equivocan de signo, no es del partido que están pensando-. El presidente se extiende durante más de una hora y sólo sirve para que Rajoy nos resulte más brillante de lo que es. Desde luego como parlamentario supera a Zapatero. Tira de ironía para arrancar, ridiculiza la empecinada visión positivista y de echar balones fuera que salpica el discurso del presidente y usa los datos económicos comparándolos con los de la UE para realizar una lectura de la realidad distinta a la de Zapatero.

Rajoy dispara con los 400 euros que no han cobrado 6,5 millones de españoles (los que se encuentran en los límites de la cotización tanto por arriba como por abajo) y José María Lasalle -responsable de muchos de los discursos del líder del PP- y Soraya Saenz de Santamaría parecen al borde del orgasmo. No es pasión, es narcisismo. Ambos se excitan al escuchar las palabras de las que se consideran autores. Lasalle, cada día más metido en su papel de intelectual de centro-derecha, se ha dejado una barba descuidada y ha evolucionado su look de empollón hasta transformarlo en una incongruente blazer blanca sobre chaleco de punto azul oscuro. El que más se ha metamorfoseado es, sin embargo, Jorge Moragas. Su sonrisa socarrona poselectoral y sus aplausos a cámara lenta han dejado paso a una renovada fe en su jefe. Su euforia es tal que que le ha robado el puesto a Martinez Pujalte y a Cañete. Ahora, además de guardaespaldas de Rajoy, es el alborotador oficial. Mucho ha debido de aprender de las convenciones demócrata y republicana norteamericanas a las que ha asistido.

Sin embargo, el tema más interesante es otro. La financiación autonómica y la votación de los presupuestos generales del Estado, han estado sobrevolando durante todas las intervenciones, sin entrar a fondo y adelantando posiciones. PNV y UPN insinúan que pueden votar a favor. Tras la dura intervención de Duran i Lleida, con algunas soluciones que el Gobierno podría 'comprar', no queda muy claro el voto catalán. Se cierra la sesión y el presidente se retira pasando de puntillas sobre el informe de la UE firmado por Almunia y que se ha dado a conocer esta misma mañana en el que se considera que España ya está en recesión. ¿A qué estamos jugando? Zapatero invoca a Antolín, la empresa de Burgos, que resulta ser un referente en la industria de componentes automovilísticos para reivindicar la fortaleza de la industria patria. Y vuelve a acusar a las hipotecas subprime de la actual situación antes de irse a comer.

El presidente lanza a sus señorías un mensaje de responsabilidad para que confíen en la fortaleza de la economía española.

Lectura recomendada para el presidente: 'El punto ciego' de Daniel Goleman.