Melilla premia a la selección de fútbol por despertar el espíritu de cohesión

Melilla.-  La Asamblea de Melilla ha entregado hoy la Medalla de Oro de la Ciudad a la selección española de fútbol, en reconocimiento al valor de la "cohesión nacional" que despertó su victoria en la pasada Eurocopa.

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(EFE)

El portero de la selección de España Iker Casillas, rodeado por sus compañeros, sostiene el trofeo de campeones de la Eurocopa 2008.

La máxima distinción que concede la Ciudad Autónoma ha sido recogida por el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, coincidiendo con la celebración del 511 aniversario de la españolidad de Melilla, en un acto en el que también se ha distinguido a los guardias civiles Román Revilla y Manuel Gallardo, que salvaron la vida a una joven.

El presidente melillense, Juan José Imbroda, ha alabado durante su intervención no sólo el papel jugado en el plano deportivo por la selección española de fútbol, sino la "vertebración política" que provocó la victoria de la Eurocopa y que "los españoles estaban deseando".

"La Medalla de Oro a la selección habla de sentimientos colectivos, de emociones compartidas y de orgullo nacional", ha dicho Imbroda, para quien el triunfo de los jugadores ha sido "el triunfo de todo el país".

Para el presidente melillense, todo lo vivido en el campeonato de Europa, con las celebraciones y las vivencias de cada partido, demuestra que España es una nación unida y cohesionada, "mucho más de lo que algunos quieren hacernos creer".

En opinión de Imbroda, la selección española de fútbol "ha hecho más por la cohesión de España que muchos políticos", de ahí que la propuesta de la concesión de la Medalla de Oro de la Ciudad partiera de él mismo.

Por su parte, Ángel María Villar ha agradecido a Melilla el que se haya convertido en la primera región que realiza un reconocimiento institucional a la selección de fútbol tras su papel en la Eurocopa.

Villar ha excusado la ausencia de los jugadores al acto por los compromisos que tienen con sus clubes, pero a cambio ha traído a Melilla la copa que el capitán de la selección, Iker Casillas, alzó el pasado mes de junio para compartirla con los melillenses.

Según el presidente de la RFEF, el reconocimiento de Melilla es extensivo no sólo a los jugadores y al cuerpo técnico que hicieron posible la victoria, sino a todos los que componen la "gran familia del fútbol".

Ha resaltado que la selección ganó el trofeo "brillantemente", ya que destacó no sólo en los resultados, sino también en el juego realizado y que sirvió para transmitir "ilusión" a todos los que contemplaban cada partido.

Villar también ha aludido al papel "vertebrador" que ha tenido el triunfo de la selección, que hizo que después de 44 años se celebrara una victoria de esta envergadura.

"No ha habido en la historia de España un hecho social o político que haya sacado a la calle a 20 millones de personas", ha resaltado el presidente de la RFEF.

Además del homenaje a la selección, Melilla también ha querido reconocer con su Medalla de Oro el papel "heroico" de los guardias civiles Román Revilla y Manuel Gallardo, quienes en febrero pasado salvaron la vida de una joven que pretendía precipitarse al vacío desde uno de los acantilados de la ciudad.

A ellos Imbroda les ha agradecido su labor y que pusieran en riesgo su vida por salvar la de otra persona, reconocimiento que puede hacerse extensible a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que hacen con su presencia que "los españoles podamos estar tranquilos".

El presidente de Melilla también ha recordado en sus palabras a los melillenses Juan Manuel Piñuel y Antonio Molina, agentes de la Guardia Civil que han perdido la vida a manos de ETA, recuerdo que suscitó el aplauso espontáneo de los presentes, entre los que se entraba Dolores Martín, madre de uno de los dos agentes asesinados.