Imaz entra en el Patronato de la Fundación Fernando Buesa para ayudar a "construir una sociedad entre diferentes"

VITORIA.-  El ex presidente del PNV y actual presidente ejecutivo de Petronor, Josu Jon Imaz, se incorporó hoy al Patronato de la Fundación Fernando Buesa, dedicada a la memoria del dirigente socialista asesinado por ETA en 2000. Imaz explicó que afronta su entrada en este organismo "como un compromiso cívico" y con el objetivo de contribuir a "construir una sociedad entre diferentes y con la pluralidad como eje de su identidad".

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EP (EUROPA PRESS)

El ex presidente del PNV y actual presidente ejecutivo de Petronor, Josu Jon Imaz, se incorporó hoy al Patronato de la Fundación Fernando Buesa, dedicada a la memoria del dirigente socialista asesinado por ETA en 2000. Imaz explicó que afronta su entrada en este organismo "como un compromiso cívico" y con el objetivo de contribuir a "construir una sociedad entre diferentes y con la pluralidad como eje de su identidad".

La Fundación, constituida poco después del asesinato del ex líder del PSE de Álava, tiene como principales objetivos la deslegitimación de la violencia, la defensa de la pluralidad de la sociedad vasca y el fomento de valores como la libertad y el diálogo.

Junto al ex presidente del Euskadi Buru Batzar (EBB) del PNV, se incorporaron al patronato el portavoz adjunto del PP en el Congreso de los Diputados, Alfonso Alonso, los parlamentarios del PSE y EB Antonio Rivera y José Miguel Fernández, respectivamente, el ex secretario general de CC.OO. en Euskadi Santiago Bengoa, la abogada Teresa Crespo, la profesora de la UPV Miren Ortubay y el escritor Ramón Saizarbitoria.

La presidenta de la Fundación y viuda de Fernando Buesa, Natividad Rodríguez, agradeció, durante la presentación de los nuevos patronos en Vitoria, las nuevas incorporaciones al órgano de gobierno de la entidad, de las que afirmó que son ejemplo de la pluralidad que caracteriza a la organización. Rodríguez destacó que "Euskadi necesita proyectos integradores en los que quepamos todos y que respeten las leyes y el Estado de Derecho".

Imaz justificó su integración en el Patronato, constituido por 28 personas, en que comparte "plenamente" los valores que pretende impulsar la fundación, como la necesidad de "compartir con el otro para construir una sociedad entre todos, entre los que sienten una identidad y los que sienten otra". En esta línea, subrayó la importancia de "construir una sociedad entre diferentes, con la pluralidad como eje de la identidad de esa sociedad".

También aseguró compartir la necesidad de "la deslegitimación social, política y ética del terrorismo" y de fomentar "la educación en valores". "Lo tomo como un compromiso cívico, un compromiso con la sociedad", explicó, en referencia a su condición de nuevo patrono.

"SUPERAR EL ODIO"

Por su parte, Alfonso Alonso explicó que uno de los rasgos comunes de los miembros de la fundación es "la esperanza de que la convivencia democrática es posible" y de que puede lograrse "un lugar de encuentro supere la fractura del odio" en el País Vasco.

Antonio Rivera explicó que "el terrorismo de ETA ha conseguido que muchas personas hayamos descubierto que la democracia no es sólo un instrumento" para avanzar hacia unos determinados derechos o valores, sino que "sin ella no se puede llegar a ninguna parte". Por ese motivo, agradeció a la fundación su labor de difusión del valor de la democracia.

El parlamentario de EB José Miguel Fernández destacó el compromiso de Buesa con "el valor de la palabra", uno de los ejes principales sobre los que se articula la labor de la fundación.

Santiago Bengoa explicó que desde el patronato espera contribuir a "la defensa de la libertad, la pluralidad y la democracia". Teresa Crespo, por su parte, mostró su admiración hacia Natividad Rodríguez, de la que afirmó que ha optado por "el valor de la palabra en lugar de por el odio y el rencor". En esta línea, Miren Ortubay destacó que la viuda de Buesa "en vez de a la venganza, se ha dedicado a sembrar semillas de paz". Saizarbitoria no participó en el acto al no poder acudir al mismo.