'Si nos dejan...': el dos de Economía hará las reformas que Zapatero rechaza

José Manuel Campa, el nuevo secretario de Estado de Economía, y la vicepresidenta económica Elena Salgado están a punto de convertirse en los mejores intérpretes del famoso bolero 'Si nos dejan' de José Alfredo Jiménez, un clásico mexicano en el que Jiménez hacía dueto con Lucha Villa —que en nada se parece a la menuda y elegante Salgado—, y que luego tantas veces interpretó Rocío Dúrcal.

Si nos dejan
nos vamos a querer toda la vida
Si nos dejan
nos vamos a vivir a un mundo nuevo.

Porque 'si los dejan' o 'si le dejan' ha sido la frase más citada esta mañana en la toma de posesión del número dos de Economía por sus colegas de universidad, viejos amigos del IESE o las decenas de técnicos del Ministerio que han asistido al cambio de carteras entre Campa y el discreto David Vegara, que ha hecho mutis por el foro entre los abrazos de compañeros de equipo e incluso de periodistas, algo poco normal en los tiempos que corren.

Yo creo podemos ver
el nuevo amanecer de un nuevo día
yo pienso que tú y yo
podemos ser felices todavía.

Campa llega con un prestigio académico unánime y el respeto de todos sus colegas en el mundo económico y, 'si le dejan', podría defender algunas de las muchas cosas que ha escrito, tales como que es partidario de la reforma laboral y del abaratamiento del despido, o el documento de los 100 economistas que tanto revuelo causó y que no ha merecido ni la más mínima atención del presidente Zapatero. Más bien al contrario.

Si nos dejan
buscamos un rincón cerca del cielo
Si nos dejan
hacemos con las nubes terciopelo.

De momento, esta mañana Salgado y su número dos no han tenido que buscar el rincón cerca del cielo, porque lo tenían atestado de políticos, la plana mayor de Economía y cargos económicos públicos y privados: Miguel Sebastián (Industria), Julio Segura (CNMV), Miguel Martín (presidente de la patronal bancaria AEB), Pedro Pérez (presidente del G-14 inmobiliario), el director del Servicio de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, el ex director de la oficina económica de Zapatero y ahora presidente de la patronal Seopan, David Taguas, el catedrático del IESE Juan José Toribio, amigo y commpañero de Campa, el inevitable presidente de Sacyr, Luis del Rivero, o el director de la Oficina Económica de Moncloa, Javier Vallés. Vallés y la directora general del Tesoro, Soledad Núñez, son viejos amigos de Campa —que "el nombre no me lo ha dado Javier Vallés", nos ha aclarado la ministra Salgado—.

Y ahí, juntitos los dos
cerquita de Dios sera lo que soñamos

Juntitos sí que han estado ya la vicepresidenta económica y su número dos, porque ella ha revelado: "Al final de una larga reunión, te ofrecí el cargo, me dijiste que estabas orgulloso de poder servir a tu país" en un momento envenenado de la economía, cuando atravesamos "la peor crisis de nuestra historia democrática". De momento, la ministra ya le ha metido en ese marrón envenenado —palabras de uno de los asistentes al acto, amigo de Campa— que es concretar la Ley de Economía Sostenible, que dará paso "a reformas estructurales importantes", en cuyo diseño Campa y su equipo tendrán un "papel destacado".

Y aquí, en este papel destacado del gran académico que es José Manuel Campa, es donde cobra más fuerza el bolero de Jiménez, porque, si le dejan, tal y como el profesor e ilustre académico que es, un tipo tan brillante como coherente, tendrá que llevar a cabo las reformas en las que confía y que ha desarrollado en varios artículos. "¿Cómo va a llevar usted a la práctica política lo que ha escrito en la teoría?", le ha preguntado algún periodista al terminar el relevo. "No es día para hablarlo, pero practicando, con la práctica".

Si nos dejan
te llevo de la mano corazón
y ahí nos vamos, si nos dejan, si nos dejan.

Acaba el bolero, pero José Manuel Campa se ha quedado más tiempo en la sala, con su familia y los amigos, que la vicepresidenta Salgado, así que no han salido juntitos.