Caramelo luchará "hasta el último segundo" por un acuerdo con el comité de empresa

A Coruña.-  El director adjunto de Caramelo, José Ángel Martín-Borregón, afirmó hoy que la empresa luchará "hasta el último momento" para alcanzar un acuerdo con el comité de empresa que permita seguir adelante con el plan de viabilidad y salvar la empresa.

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(EFE)

Unos 400 trabajadores de Caramelo se concentraron el pasado ems de amyo ante la sede de la Xunta, en Santiago de Compostela, para exigir a la conselleira de Trabajo que reciba al Comité de Empresa para tratar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE). EFE/Archivo

Martín-Borregón, que esta mañana participó en un encuentro con periodistas, explicó que el plazo de 30 días para la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) presentado por Caramelo concluye "entre el 14 y el 18 de junio", aunque se mostró partidario de prolongar un poco más la negociación para lograr el acuerdo.

El director adjunto de Caramelo afirmó que "si no entendemos el marco, no entendemos la solución".

En su opinión, el equipo directivo anterior "se equivoca totalmente" en la ejecución del plan, "ya que hizo proyecciones de crecimiento absolutamente inalcanzables, y desarrollaron un proceso de externalización mal llevado a cabo en la práctica, no en lo conceptual", aclaró.

Cuando la nueva directiva tomó las riendas, en octubre de 2008, se encontró con un diagnóstico "demoledor", dijo, con pérdidas en 2008 de 30 millones de euros y de 50 contando con el ejercicio 2007.

Para asumir la deuda contraída "se necesita toda la amplitud del plan de viabilidad", apuntó Martín-Borregón, dentro del que se incluye un ERE que afecta a 237 trabajadores, la mitad de ellos del centro de producción de A Grela, en A Coruña.

El objetivo, indicó, es que la empresa no logre beneficios en 2009, pero tenga implementadas todas las medidas del plan para que, en 2010, alcance un "punto muerto" que le permita cerrar en positivo el ejercicio 2011.

Reconoció que el planteamiento de un ERE es una situación "durísima", pero recordó que esa decisión se toma para "preservar la compañía" y mantener los otros 595 puestos de trabajo.

Explicó que cuando la nueva directiva llegó a Caramelo se encontró con una deuda financiera "muy fuerte" por lo que se vio en la necesidad de pedir créditos que están "vinculados a la mejor viabilidad de la empresa, no al proyecto empresarial", dijo.

Las metas más inmediatas de la empresa pasan por alcanzar un acuerdo con el comité de empresa en el que, incidió, "impere la lógica, porque vamos a salvar la empresa", al tiempo que se comprometió a conseguir "la mejor prejubilación posible dentro de los recursos económicos" de Caramelo para los cerca de 30 trabajadores mayores de 55 años afectados por el ERE.

Martín-Borregón informó de que "no es lo mismo deslocalización que externalización", ya que la planta de A Grela "seguirá estando allí", y que, en un futuro, cuando haya beneficios, éstos se quedarán en A Coruña.

Asimismo, señaló que intentarán mantener todas las tiendas y la calidad del producto, al tiempo que anunció que el plan de acompañamiento contempla el derecho preferente de los despedidos cuando la empresa presente una vacante. "La empresa ha de crecer y ojalá en cinco años se pueda volver a contratar a 237 trabajadores", señaló.