Piden a Obama que no reconozca ningún proceso electoral bajo el Gobierno facto en Honduras

Washington.-  El ex embajador de Honduras ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Carlos Sosa, pidió hoy en una carta abierta al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que no reconozca ni apoye ningún proceso electoral que se lleve a cabo en el país centroamericano bajo el Gobierno de facto.

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(EFE)

El ex embajador de Honduras ante la OEA, Carlos Sosa, subrayó que los que defienden a Zelaya y condenan el golpe de Estado no piden ni tolerarían "ninguna intervención directa norteamericana" en Honduras. EFE/Archivo

La misiva fue difundida por la Misión de Honduras ante la OEA y se publicó días antes del inicio de la campaña electoral en Honduras, el próximo 31 de agosto, para los comicios previstos para el 29 de noviembre.

Sosa ya no representa a su país desde que la OEA suspendió la participación de Honduras en el organismo interamericano, el pasado 4 de julio, como respuesta al golpe de Estado del 28 de junio que derrocó y expulsó del país a Manuel Zelaya.

"Esperamos que el Gobierno de EE.UU. no reconozca ni apoye ningún proceso electoral llevado a cabo bajo la tutela de un régimen basado en la fuerza y en casi constante estado de sitio", señaló Sosa.

De acuerdo con el ex embajador de Honduras ante la OEA se trata de un régimen que en sólo dos meses que lleva en el poder ha sido objeto de "preocupantes" informes sobre sus "atropellos" a los derechos humanos.

En su carta, Sosa subrayó que los que defienden a Zelaya y condenan el golpe de Estado no piden ni tolerarían "ninguna intervención directa norteamericana" en Honduras.

"Los hondureños podemos luchar contra el gobierno golpista basados en nuestra Constitución y nuestro legítimo derecho a la insurrección, que ella permite, enuncia y ordena frente a un régimen surgido y sostenido por la fuerza de las armas", señaló.

Esta lucha, agregó, se producirá de manera "pacífica, consecuente con nuestro compromiso con la vida".

"Únicamente pedimos a EE.UU. y a la Administración Obama ser consecuentes con la Carta Democrática Interamericana (de la OEA)".

Por otra parte, pidió a EE.UU. que, "dentro de su propio territorio y sin abandonarlo, aplique las sanciones de acuerdo con su legislación interna directamente contra los golpistas" y no contra el pueblo hondureño y, sobre todo, no contra los pobres, que constituyen la mayoría de la sociedad, rogó Sosa.

En la misiva, Sosa expresó también su esperanza de que el golpe de Estado y la lucha del pueblo hondureño por la restitución de Zelaya "no se inscriba maliciosamente en la política" de Venezuela y de su Gobierno, en los conflictos que pueda tener con su oposición interna, con sus vecinos o con cualquier otro interés o Gobierno.

"Somos amigos de Venezuela desde 1826, lo hemos sido a través de la historia desde esa fecha y aspiramos a continuar siéndolo", dijo.

Sosa recalcó que la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA) "es un instrumento de desarrollo y cooperación con ningún compromiso de carácter militar e ideológico".

Algunos senadores de EE.UU., como el republicano por Carolina del Sur Jim DeMint, quien justifica el golpe de Estado y alude a la influencia del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en ese país.

Según Sosa, Obama "entiende perfectamente que los intereses detrás del golpe en Honduras son los mismos que lo llamaron a él socialista y lo siguen llamando, los que le negaron su nacionalidad estadounidense y dijeron que era musulmán, cosas que no son ciertas como tampoco son ciertas las cosas que afirman sobre Honduras".

"Todos sabemos que estos grupos de interés, contratan a grupos de presión, compran espacios mediáticos e invierten grandes sumas para salirse con la suya. Pero no esta vez, no ahora", concluyó el ex embajador de Honduras ante la OEA.