La AIE sigue al FMI y estima que la demanda mundial de petróleo será mayor

París.-  La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ateniéndose a las nuevas perspectivas económicas del FMI, más optimistas, ha corregido también al alza sus propios cálculos sobre el consumo mundial de petróleo tanto para este año como para el próximo por quinto mes consecutivo.

En su informe mensual sobre el mercado petrolero presentado hoy, la AIE aumentó en 200.000 barriles diarios las expectativas de consumo para el conjunto del actual ejercicio hasta 84,6 millones de barriles diarios, y en 350.000 para 2010 con 86,1 millones.

Las sucesivas revisiones son en conjunto muy significativas desde el pasado mes de mayo, cuando la agencia había bajado sus estimaciones para 2009 hasta 83,2 millones de barriles diarios, en lo que se suponía que iba a ser el mayor bajón del mercado desde 1981.

Pese a todo, el volumen de consumo de crudo este año -según el estudio de este mes- será un 1,9% inferior al de 2008 y la recuperación de 2010 no compensará totalmente esa caída (+1,7%).

Las nuevas cifras responden a la revisión al alza de las perspectivas del Fondo Monetario Internacional, que ahora calcula que la contracción de la economía mundial en 2009 será del 1,2%, dos décimas menos de lo estimado hasta ahora, y que el ascenso de 2010 se situará en el 3,1% (1,2 puntos porcentuales más).

La corrección del volumen de demanda de petróleo en el mundo realizado por la AIE -que reúne a los mayores consumidores de energía de entre los países desarrollados- responde, sobre todo en 2010, a los signos de recuperación de países emergentes de Asia (China, Taiwán, India, Indonesia, Malasia y Singapur) y de América (Brasil).

Los autores del informe también atribuyeron en parte el aumento de sus cifras de consumo al mundo desarrollado, ya que 70.000 de los 200.000 barriles diarios suplementarios de 2009 y 70.000 de los 350.000 de 2010 corresponden a países de la OCDE.

Se trata sobre todo de Norteamérica (Estados Unidos, Canadá y México), Japón y Corea del Sur. Por su parte, en Europa diferentes signos sugieren que cualquier apunte de recuperación "sigue siendo frágil".

Un indicador que puede ser interpretado como un signo de que se está gestando la recuperación es que en septiembre los países productores pusieron en el mercado 84,9 millones de barriles diarios, 310.000 barriles más que el mes pasado. Lo más significativo es que esa cifra es equivalente a la que se daba el pasado año en las mismas fechas.

La agencia reconoció que en los mercados hay una cierta preocupación por las tensiones diplomáticas con Irán ante la eventualidad de que una crisis acarreara el corte del suministro de hidrocarburos desde ese país.

Pero recordó que las capacidades excedentarias de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) totalizan unos 5,45 millones de barriles diarios (5,23 millones sin Irán), mientras que la producción iraní de crudo era en septiembre de 3,78 millones de barriles diarios (20.000 menos que en agosto), de los cuales unos 2 millones se exportan.

Esas preocupaciones estuvieron en el trasfondo de la evolución de los precios del petróleo, que el mes pasado siguieron negociándose en una horquilla de 65-75 dólares por barril.

La AIE recordó que en los mercados de futuros, al integrarse una evolución más favorable del Producto Interior Bruto (PIB) mundial, se anticipa un barril en torno a los 75 dólares.

Sobre las reservas industriales de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la agencia informó de que disminuyeron en 3,9 millones de barriles para representar 2.750 millones de barriles.

Pese a esa baja, las reservas del mundo desarrollado estaban un 2,8% por encima del nivel del pasado año en las mismas fechas.

La AIE celebra los próximos 14 y 15 de este mes su reunión ministerial bienal en París, y en esta ocasión tendrá dos temas clave, la seguridad energética y el reforzamiento del diálogo global en el sector de la energía, para lo que se ha invitado a los representantes de China, India y Rusia, que aunque no son miembros de la organización tienen cada vez un peso mayor.